Con el reloj en cuenta atrás y a falta de una única exaltación, la Vall d’Uixó vivió ayer uno de los actos de presentación fallera más multitudinarios en cuanto a representantes de una comisión sobre el escenario, con motivo del nombramiento de la joven Ariadna Sales i Agea como fallera mayor de la falla l’Ambient, una de las veteranas de la ciudad.

Un total de 29 niñas y jóvenes acompañaron a su representante en un evento, necesariamente intenso y lleno de emotividad para sus protagonistas y relevante para el resto de integrantes de la falla, que fue una exhibición pública de salud festiva, además de integración y de participación.

Con la intención de amenizar el acto de exaltación y hacer pasar un momento agradable y de interés a los asistentes, los organizadores apostaron por iniciar la exaltación con una representación cargada de simbolismo, recreando la transmisión del sentimiento fallero como el que prepara una receta.

LA fórmula DEL ÉXITO / Un caldero ocupó una parte del escenario y dos pequeños falleros, un niño y una niña, fueron introduciendo en su interior, acompañados por una voz en off que sirvió de guía, todos los elementos que definen y describen a l’Ambient. Valores que comparten y defienden quienes conforman una entidad que mantiene esta tradición con el mismo entusiasmo y hermandad de sus fundadores.

La falla presidida por José Francisco Mora no descuidó los aspectos protocolarios que permiten dar relevancia a cada uno de los participantes, desde los más pequeños hasta las falleras mayores de la ciudad, Sheila Martínez y Helena Amorós, que cerraron el homenaje a Ariadna.