El Ayuntamiento de Cabanes, de forma consensuada con la oposición, anunció este jueves la suspensión de las fiestas de verano, que estaban previstas del 31 de julio al 9 de agosto.

De la misma forma, tampoco se celebrarán unos días antes los actos programados para Sant Pere en la Ribera, que iban a tener lugar del 27 de junio al 5 de julio. Aun así, mantienen como festivo local el 29 de junio.

Desde el consistorio reivindican que la decisión se ha tomado pensando en el bienestar de los vecinos para evitar cualquier posible contagio, ya que estas celebraciones se caracterizan por eventos de gran acumulación de gente, como toros y orquestas.

El Ayuntamiento destinará el dinero de las fiestas a un plan de empleo e impulso de la actividad económica, con el que buscan ayudar a los vecinos a hacer frente a la crisis económica.