El grupo municipal socialista de Alcalà de Xivert manifestó ayer sus críticas por el cierre de la guardería de Alcossebre tras haber renunciado en agosto la empresa que se encargaba de su dirección. Para el portavoz de la formación, Joan Ronchera, este hecho supone un «problema para los padres y madres con niños pequeños, que tienen que hacer auténticos malabarismos para conciliar el cuidado de sus hijos y las responsabilidades laborales». Por todo ello, propone que el consistorio se encargue de la gestión directa.

Desde el equipo de gobierno, la concejala de Educación, María Agut, detalló que el ejecutivo local «licitó el servicio en las últimas semanas, en condiciones muy ventajosas, pero ninguno de los interesados acabó presentándose, ya que con la cantidad de usuarios que tiene no salen los números y la administración municipal no puede hacerlo directamente y de inmediato». Como solución a las familias afectadas se creará una línea de ayudas al transporte, para que estos menores puedan acudir a las instalaciones de la guardería de Alcalà.

Además, se ha pedido a la Generalitat la compatibilidad de las instalaciones como escuela infantil para el próximo curso. Con el trámite, los gestores tendrían una ayuda adicional de 140.000 euros.