Cientos de aficionados taurinos de toda la provincia corrieron ayer delante de seis toros cerriles en el encierro que se celebró en Vall d’Alba. Una carrera que marcó el verdadero inicio de un programa de fiestas que suma más de 70 eventos que se desarrollarán hasta el próximo domingo. La media docena de animales de La Laguna emprendió la salida poco después de las 12.00 horas, desde el corro de la calle Mayor.

El recorrido // El trazado fue el mismo de las ediciones anteriores, de casi un kilómetro de distancia que, a pesar de las medidas de seguridad, contó con puntos de gran rapidez y visibilidad, como la recta de más de 800 metros ubicada en la avenida Castelló.

El final de la carrera tuvo lugar en el coso taurino del municipio, puesto que Vall d’Alba es la única localidad de toda la provincia que celebra unas carreras que terminan en una plaza de toros.

Durante todo el trayecto, los astados demostraron su casta y los mozos corrieron delante de los ejemplares. Afortunadamente, la cita finalizó sin el más mínimo incidente. No obstante, uno de los cerriles quedó rezagado y por ello, el final de este encierro, que era una de las citas taurinas más esperadas de las celebraciones, fue especialmente intenso.

La alcaldesa, Marta Barrachina, aseguró que en el programa de las fiestas «contamos con todo tipo de actos taurinos para deleite de los aficionados» y recordó que hoy, mañana y el sábado tendrán más exhibiciones.