La iglesia del patrón de Burriana acogió ayer por la tarde la segunda conferencia de las Jornadas de Historia y Patrimonio de Sant Blai, un acto que congregó a vecinos interesados en conocer a fondo los hallazgos arqueológicos realizados a raíz de las obras de reconstrucción y acondicionamiento del entorno de la ermita, entre los que destacan restos que se remontan a la época musulmana.

El arqueólogo municipal, José Manuel Melchor, fue el encargado de exponer de forma detallada los descubrimientos, en base a los cuales argumentó la importancia de seguir investigando para aumentar la riqueza patrimonial e histórica de Burriana.

VALOR EN ALZA / Melchor hizo referencia a que en la década de los ochenta aparecieron una serie de indicios que apuntaban a que esa área merecía un estudio pormenorizado, pero nada hacía sospechar que en un análisis de las primeras capas y con los datos que de ellas se han extraído hayan podido deducir que la zona fue la puerta de entrada a la población en la época musulmana.

El programa vespertino de ayer se inició con una visita guiada por los alrededores del templo, en la que los participantes pudieron conocer de primera mano las antiguas estructuras y diferentes elementos arquitectónicos que han salido a la luz en la excavación, integrados en el Jardín arqueológico, proyecto de puesta en valor de estos recursos. La intención es preparar lo que se conoce como ventanas arqueológicas, que servirán para visibilizar los muros anteriores al siglo XVIII, el pavimento hidráulico correspondiente a la edificación del antiguo hospital y un pequeño pozo de época musulmana.

A partir de toda la información recopilada, estiman que la iglesia de Sant Blai está asentada sobre un conjunto arquitectónico anterior a la época de su construcción (1882), integrado por el ermitorio y un hospital de pobres, que dataría del siglo XIV.