Para los vecinos de Nules, ayer era el día grande en honor a su patrón, Sant Bartomeu, y desde el pasado sábado, en condiciones normales, estarían sumidos de lleno en las celebraciones, pero el único acto presencial que incluye este año el programa es la misa mayor.

El protocolo fue parecido al que se habría cumplido sin pandemia: la eucaristía contó con la presencia de la reina de la Vila 2019 y su corte de honor, así como de las autoridades municipales, aunque hubo muchos aspectos que marcaron la diferencia. La principal, la distancia de seguridad. La necesidad de respetar de forma estricta el aforo y las distancias de seguridad marcaron ausencias en una misa que pasará al recuerdo como la de los espacios vacíos entre feligreses.

El alcalde, David García, en su mensaje a la ciudadanía en una época socialmente tan complicada por el covid, señaló que «es el momento de la prudencia, de la responsabilidad individual y social, para que pronto, nuevamente, volvamos a disfrutar de aquello que más nos gusta y que nos identifica como pueblo, a través de la singularidad de nuestras fiestas».

RECUERDOS VIRTUALES / Ante la imposibilidad de sumar nuevos recuerdos a la historia de las patronales de Nules, el Ayuntamiento ha optado por echar manos de la memoria, y a través de las redes sociales compartirán momentos destacados de eventos tan destacados como las últimas presentaciones de las reinas de la Vila, la Cridà o la noche de los disfraces.

Para velar por el cumplimiento de las recomendaciones y nueva normativa sanitaria, el Ayuntamiento prohibió la apertura de los casals, una indicación que tuvo un cumplimiento generalizado dado que, como confirmó el alcalde, el primer fin de semana no se produjo ninguna incidencia en este sentido, salvo una en la playa, en una vivienda particular.