L os Ayuntamientos de Orpesa, Nules y Vinaròs acometen los preparativos necesarios en los centros educativos durante los últimos días, como pequeñas reformas en los accesos o el refuerzo de la presencia policial, para garantizar un regreso seguro a las aulas ante el inminente inicio del curso escolar a partir del 7 de septiembre.

Orpesa mantuvo ayer una reunión con las direcciones de colegios, el instituto y la escuela infantil con el objetivo de coordinar el inicio del ejercicio escolar. En este sentido, la alcaldesa, María Jiménez, anunció que el consistorio les dotará con termómetros a distancia, incrementará la limpieza y realizará un análisis periódico de las aguas fecales con el fin de controlar la presencia de covid-19.

Mientras, en Nules ultiman los trabajos de adaptación, tal y como supervisó el primer edil, David García, en su visita a las infraestructuras educativas del municipio, donde también recogió las carencias existentes para mejoras en futuras intervenciones.

Por su parte, Vinaròs reforzará la presencia policial en los accesos para evitar aglomeraciones, según detalló la concejala de Educación, Begoña López, que aprovechó para lanzar una mensaje de tranquilidad: «El profesorado y las concejalías han trabajado para que los alumnos estén seguros en las escuelas, pero hay que respetar todas las medidas establecidas».

Esta medida se sumará a las tomadas en cada uno de los centros. En el de la Asunción, como señaló López, es donde se han realizado más intervenciones, entre las que figura la sustitución de una de las puertas de acceso y la habilitación de una rampa de hormigón y una pasarela de madera para facilitar la entrada de los escolares. Similar actuación la que se ha llevado a cabo en el CEIP Jaume I, donde también se ha instalado una nueva puerta y se señalizarán las distancias de seguridad para la separación de los familiares.

Mientras, en los institutos de la localidad los esfuerzos se centran ahora en el transporte escolar. H