Un volteo general de campanas en las seis parroquias de la Vall d’Uixó anunció que la ciudad está de fiesta grande. Y es que los feligreses van a vivir esta semana un momento histórico, la visita de la imagen peregrina de la Virgen de los Desamparados.

Su recibimiento estuvo a la altura de la devoción que se le profesa en el municipio y la primera parada era inevitable, el templo del que es titular en la parroquia de Jesús Obrero, la capilla de la Colonia Segarra, donde organizaron el acto de recepción y bienvenida, paso previo a una serie de citas religiosas que ayer se alargaron hasta la tarde, cuando se trasladó hasta la parroquia de Nuestra Señora de Lourdes.

El programa en una festividad tan señalada no dará tregua y repetirá las expresiones de fe más significativas, dado que en todas las iglesias se producirá una vigilia de oración mariana y turnos de vela durante toda la noche. Y será así el próximo domingo, cuando se celebrará la eucaristía de clausura y la procesión general desde la ermita de Sant Vicent hasta la iglesia del Santo Ángel.

A lo largo de todos estos días la Peregrina presidirá una misa en honor a Sant Vicent con motivo del 600º aniversario de su muerte, una celebración del bautismo que esperan multitudinaria y que culminará con el paso de los bebés por el manto o el homenaje musical que organizan en la parroquia de Santiago Apóstol, entre otros homenajes.