El edificio Natiu de Nules aspira a ser mucho más que un inmueble antiguo y emblemático rehabilitado. Así lo anunciaron las autoridades el día de la inauguración de las obras de reforma y, para demostrar que aquella no era una mera declaración de intenciones, así se escenificó ayer por la tarde, con la celebración del I Foro de Empresas.

Esta iniciativa, que nace con vocación de continuidad, pretende reunir a quienes sustentan la base de la actividad económica del municipio (comercios y empresarios), para establecer «un proyecto de desarrollo integral en el que todos se sientan implicados», aseguró el edil de Comercio, César Estañol.

Ayer quisieron dar los primeros pasos. Sobre todo «ofreciendo información y presentándoles las instalaciones y los servicios que están a su disposición, como los de la antena local de la Cámara de Comercio», que aprovechó la ocasión para darles detalles sobre las ayudas a la innovación y la renovación tecnológica.

Otro de los valores en alza que se quiso promocionar fue el Hervidero de Empresas, «que no solamente está pensado para nuevas ideas de negocio, sino para comercios o mercantiles que deseen reinventarse».

Y en reconocimiento a quienes día a día desarrollan su actividad, se rindió homenaje al comercio más antiguo, la pastelería José Adsuara; y a una firma que se distingue por la empleabilidad que genera, Ramón Manzana. Ya cara al año que viene crearán unas bases para premiar este trabajo.