El proyecto de rehabilitación integral de la Torre Sant Vicent de Benicàssim ha sido incluido en la convocatoria del 1,5% cultural del Ministerio de Fomento tras varios años de espera.

En total, la inversión asciende a 311.000 euros, de los cuales, el Gobierno central aportará 276.937, de modo que sufragará el 75% del presupuesto. Ahora, de manera inmediata, según afirmó la alcaldesa, Susana Marqués, “se pondrán en marcha los mecanismos administrativos necesarios para que se agilice al máximo el inicio de los trabajos” y cuanto antes se pueda convertir la torre “en un espacio visitable y atractivo para los turistas”.

El Ayuntamiento lleva varios años aspirando a esta ayuda para mejorar este bien de interés cultural (BIC). De hecho, en el 2015, se quedó a las puertas, ya que ocupó el puesto número 64 de los 63 escogidos por el Gobierno central, aunque se situó el primero de la lista de espera.

El plan de restauración de la torre tiene como objetivo convertir el edificio de origen defensivo en visitable, así como en sede de actividades de interpretación de su historia, pues data del siglo XVI. La fortificación tiene una altura de 13,93 metros y, a partir de su rehabilitación, tendrá una superficie construida de 138,17 m2, según informaron ayer desde el Ayuntamiento benicense.

Las tareas comenzarán con la subsanación del deterioro a causa de la meteorología y el paso del tiempo, así como las distintas actuaciones se hicieran en el inmueble. El proceso consistirá en la recuperación de los muros, paramentos y se tratará de salvaguardar y retornar el concepto primigenio de la torre con la finalidad de mostrar al visitante lo que fue en su origen.

La obra contempla, además, la dotación de instalaciones que permitan una mayor accesibilidad al edificio y realizar actividades culturales de promoción de la historia en su interior. El proyecto pretende convertir el conjunto, tanto de manera exterior como interior, en un punto de interés local que ponga en valor este monumento declarado como bien de interés cultural “y que ahora, gracias a ese reconocimiento, por fin obtiene el apoyo ministerial para su recuperación”, señalaron desde el consistorio.

VALOR ARQUITECTÓNICO // En este sentido, Marqués declaró que es “una excelente noticia” que llevan años esperando para poder devolver el valor arquitectónico y patrimonial a uno de los “monumentos más representativos y destacados del municipio”.

Desde la torre, sus vigías cumplían una importante función de control de la costa para proteger a los benicenses de los ataques de los piratas berberiscos, procedentes del norte de África, que hasta prácticamente el siglo XIX asaltaban estas tierras, secuestrando mujeres, decapitando hombres o llevándoselos como esclavos.

Además, se trata de una de las pocas que se mantienen en buen estado de conservación de la costa de la Comunitat Valenciana. H