Vinaròs Vinaròs rindió anoche homenaje a su producto gastronómico estrella con la celebración de la Fiesta del Langostino, que por segundo año consecutivo se celebró en la plaza de España, detrás de la plaza de toros. Esta vez el tiempo acompañó --el año pasado llovió justo cuando tenía que empezar--, y la fiesta pudo celebrarse con total normalidad. A esta clásica cita del verano acudieron alrededor de 1.000 personas, entre vinarocenses y visitantes, para disfrutar de una velada muy agradable. J. FLORES