La reparación del puente que delimita los términos municipales de Moncofa y Xilxes, que lleva muchos años en constante deterioro y que lo convierten en una auténtica aventura para discurrir por él, se encuentra en vías de solucionarse, por cuanto ambos ayuntamientos han asignado una partida económica para llevar a cabo su rehabilitación total, especialmente en el tramo que da acceso a los polígonos industriales Casablanca, en Moncofa; y Els Plans, en Xilxes.

Y es que los dos municipios siguen trabajando, a través de comisiones específicas creadas al efecto, para delimitar el deslinde real que, por ahora, continúa siendo una incógnita. Aun así, los dos consistorios han decidido «hacer un esfuerzo» para llegar a un consenso para reparar el puente en cuestión y dotarle de un firme en condiciones.

No hay que olvidar que este paso elevado conduce a dos áreas industriales que generan un importante tráfico de vehículos pesados, aunque es más utilizado por los transportistas que diariamente acceden al polígono Els Plans de Xilxes, dado que muchos de los camiones que van en dirección al polígono Casablanca de Moncofa, acceden por el Camí Cabres, que es por donde está la entrada principal del mismo.

Ambos ayuntamientos continúan en contacto y descartan que el nuevo deslinde afecte a los propietarios de los terrenos que delimitan los dos términos municipales. De lo que se trata es de marcar una demarcación definitiva pero, paralelamente, tienen claro que la prioridad ahora es rehabilitar el paso que salva la vía del tren y darle la máxima seguridad para los usuarios.

POSITIVIDAD // Al respecto, el alcalde moncofense, Wenceslao Alós, asegura que «estamos en la línea positiva y en el transcurso de este mismo trimestre, trataremos de darle la viabilidad, para que esta infraestructura sea objeto de una gran mejora». Por su parte, su homólogo en Xilxes, José Martínez, añade que «en el presupuesto municipal de este ejercicio contamos con una partida económica para poder hacer frente a la rehabilitación del puente».

Alós recuerda que «ya son más de 10 los años transcurridos esperando una solución, tanto al deslinde como a la reforma del paso elevado y ahora vamos a dar respuesta a este problema».

Hace ahora una década, en el 2007, ambas localidades estaban sumergidas en un boom urbanístico que, aunque a día de hoy no se ha plasmado en zonas urbanizadas, en el caso de Xilxes sí que incluye el desarrollo de un campo de golf que limita en algunos puntos con la supuesta demarcación para completar la cual se contará con la colaboración de la Diputación de Castellón.