El Barça, que había logrado una ventaja de 4-1 en la ida, firmó una debacle histórica al caer 3-0 en el Olímpico ante el Roma, lo que le dejó fuera en los cuartos de la Champions. Los goles de Dzeko, De Rossi y Manolas, con un cabezazo en el 82, dieron al Roma una clasificación inesperada ante un Barcelona que nunca creó concretos peligros y que terminó castigado por su pasividad.

El conjunto romano se quedó varios minutos en el césped al finalizar el encuentro para celebrar una auténtica hazaña, ya que no llegaba tan lejos en la Copa de Europa desde 1983/84, cuando alcanzó y perdió la final.

Valverde apostó por el mismo once que triunfó 4-1 en la ida, con Busquets que salió desde el comienzo pese a que no estuviera al máximo de forma. El Roma salió con un 3-5-2 que le dio grandes dividendos, ya que la superioridad numérica en el centro del campo dificultó notablemente la circulación de balón de un Barcelona que no podía salir con el balón jugado desde atrás.

El conjunto catalán tuvo una primera tímida ocasión con un disparo de Sergi Roberto, pero segundos después fue castigado con el 1-0 de Dzeko, que desató la euforia total de los 56.500 aficionados del Olímpico. Todavía les faltaba mucho por disfrutar.

Aún en la primera mitad, en el minuto 29 Schick envió el balón fuera por pocos centímetros mientras que en el 37 fue Dzeko quien se acercó al segundo tanto con otro testarazo que Ter Stegen envió a córner. Tras el descanso llegaron los dos goles que dieron el pase a los italianos. El primero, de penalti transformado por De Rossi y cometido por Piqué a Dzeko. El tercero y definitivo fue anotado por Manolas, que se anticipó a todos en el primer poste y cabeceó un centro de Under enviando el balón entre las mallas. Los últimos minutos se vivieron con enorme intensidad, con un Roma que se encerraba atrás para defender su portería, mientras el Barcelona se volcaba al ataque cuando ya era demasiado tarde.

ADIÓS DEL CITY // También dijo adiós a la competición el Manchester City de Guardiola —que fue expulsado—, ante un Liverpool que ganó en los dos partidos de la eliminatoria (3-0 y 1-2).