No hubo milagro para el Barça de la castellonense Gemma Gili (24 años). El Atlético no falló y con su triunfo ante la Real Sociedad con un hat trick de Esther González (1-3) selló su tercera Liga Iberdrola consecutiva. El equipo azulgrana necesitaba ganar en Tenerife en la última jornada y que las colchoneras perdieran, pero no sucedió ni una cosa ni otra. El Granadilla, entrenado por un viejo amigo del Barça, Pier Luigi Cherubino, sorprendió al conjunto catalán (1-0), que según llegaban las noticias de Zubieta empezó a pensar en la final de Champions del próximo 18 de mayo.

El sueño azulgrana se antojaba complicado dados los números del Atlético en este campeoanto: han ganado todos los partidos excepto los dos duelos contra el Barça, que cayeron del lado catalán. A los 14 minutos Esther ya había adelantado a las campeonas ante la Real (un partido que se repetirá el próximo sábado en la final de Copa) y a los 45 sentenció el título. Para cuando las donostiarras redujeron diferencias, María José había apuntillado moralmente al equipo de Lluís Cortés en el Municipal de la Palmera de San Isidro. «Si queremos ganar ligas en un futuro, tenemos que competir mejor en estos campos», reclamó el técnico azulgrana tras la derrota. Cortés pidió pasar página rápido para centrarse en el histórico partido que aguarda contra el Lyón en dos semanas: «Debemos ser autocríticos, pero no nos podemos distraer ni un segundo de un objetivo muy ambicioso como es la final de la Champions. Hay que seguir trabajando para competir lo mejor que podamos».

Reconciliación con Buyo

El Granadilla se jugaba repetir la histórica cuarta plaza de la temporada pasada, y lo logró. «Los equipos de Tenerife han demostrado que pelean con honradez y profesionalidad», dijo Pier, que, 27 años después de marcar un gol al Real Madrid que puso en bandeja la Liga para el Barça de Cruyff, se convirtió en verdugo azulgrana. «Igual he firmado las paces con Buyo», bromeó tras ser manteado por sus jugadoras, pues era su último partido en el club, que ha decidido prescindir de sus servicios para el próximo curso.