El Villarreal partió en la tarde de ayer hacia Vigo con una gran dosis de ilusión en sus maletas. La ilusión de seguir engordando un récord como invicto que en Balaídos puede cumplir su 14ª jornada consecutiva, la de mantener la fortaleza defensiva que ha llevado a los de Marcelino a dejar su portería a cero en los últimos cinco encuentros de Liga y, sobre todo, la ilusión de seguir amenazando muy seriamente la tercera plaza que ahora está en poder del Real Madrid y que los de Marcelino ven a dos puntos. De ganar al Celta esta noche (20.00 horas, Canal+ Liga/Abono Fútbol) los amarillos superarían momentáneamente a los blancos. Y quién sabe si antes de la medianoche los amarillos podrían acostarse en plaza directa de Champions; solo haría falta que un viejo amigo, Giuseppe Rossi, y sus compañeros del Levante dieran otro disgusto a los de Zidane, alicaídos tras su último fracaso en el derbi madrileño.

Ni lesiones ni la saturación de partidos han provocado un paso atrás de los amarillos en su pelea por regresar a la Champions. Al contrario, los de Marcelino ha ido metiendo puntos y más puntos a sus más directos rivales hasta marcar un margen de 11 puntos sobre la quinta plaza. Hoy, de derrotar al Celta, los vigueses ya tendrían imposible dar alcance a un Villarreal 14 puntos por encima; el Sevilla también depende de una gesta para alcanzarla.

Y a partir de ahí, el Villarreal se ha ganado el derecho a soñar con un billete directo para la próxima Liga de Campeones. Desde que empezara el 2016, los de Marcelino ha sumado más puntos que un Madrid que ve como el empuje amarillo pone en riesgo su planificado calendario de giras mediáticas y promocionales del próximo verano. El efecto Zidane se ha saldado con 17 puntos; los nueve encuentros de Liga del Submarino durante este 2016 ya presentan un balance de 19. Los merengues tienen motivos sobrados para estar preocupados.

Evidentemente, el objetivo de dar alcance al Madrid no aparecía en una hoja de ruta que el Villarreal siempre cumple escrupulosamente: primero, la permanencia; después, intentar estar entre los seis mejores de la Liga. El sobresaliente alto ya es la cuarta plaza que ocupa; desplazar al Madrid de la tercera sería la matrícula de honor de un grupo que ha ido ganando solidez conforme avanza la temporada.

CARRUSEL DE CAMBIOS // Marcelino volverá a modificar el once para encontrar el punto perfecto de rendimiento entre los jugadores disponibles, a los que ayer se sumó el canterano Rodri ante algún posible problema entre los tres mediocentros: Bruno, Pina y Trigueros. Como se esperaba, caen Musacchio (sobrecarga en el cuádriceps derecho) y Jaume Costa (se recupera de unos problemas en el tobillo), además de Jonathan y Samu García. Con respecto al último encuentro ante el Levante, están previstos los regresos al once de Mario, Víctor Ruiz, Rukavina, Denis Suárez, Soldado y Bakambu. Toda la presión será para los celestes. Toda la ilusión para los amarillos. H