Cuentan, y debemos creerles, que no es por el fallecimiento del mallorquín Luis Salom en Montmeló. Explican, y debemos pensar que es cierto, que tampoco tiene nada que ver con el récord de caídas de este año: 1.049 caídas. Ni por las lesiones, pues solo se han hecho daño, un 13% de los pilotos que rodaron por el suelo. También desmienten, los que dirigen el campeonato, desde la compañía Dorna hasta la Federación Internacional de Motociclismo (FIM), escuderías (IRTA) y fabricantes, que sea una cuestión de dinero y la pretensión de crear sus propias homologación de cascos y monos, como ocurre, en parte, en la F-1 con la FIA.

Pero lo cierto es que el Mundial ha decidido que todo el mundo pase la ITV. O, como poco, que acepte la intervención de la organización del campeonato para comprobar que todo está en su sitio. «Tratamos de hacerlo todo en estrecha colaboración con las marcas de cascos y de monos, pues a todos nos interesa que el Mundial sea lo más seguro posible», señala Javier Alonso, uno de los responsables de Dirección de Carrera, que recuerda que, desde hace ya tiempo, es obligatorio que los pilotos lleven el protector de espalda, bajo su mono, y también recomendable que lleven un protector en su pecho. Y, a partir de 2018, será obligatorio (problema para Jorge Lorenzo, que no le gusta nada) que los monos, todos, vayan equipados con el airbag «pues nos ayuda a salvar vidas y a reducir las lesiones graves», explica Javier Alonso.

Las diez marcas de monos están colaborando, en efecto, aceptando someter sus productos a un arbitraje o revisión de Dorna. Al término de la gira asiática, en Malasia, se recogió un casco de cada marca para ser y probado en un laboratorio especial de Italia. Varias responsables de las marcas de cascos expresaron su sospecha de que los organizadores del Mundial busquen, con esta prueba, demostrar que hace falta una homologación especial para la competición, ya que las caídas en los circuitos no son iguales a las de la carretera.

Lo que defiende el organizador es que, en efecto, los cascos actuales del Mundial son estupendos, sí, pero tienen algún problema. «Por ejemplo, los que son de carbono soportan muy bien los golpes, pero no está claro, por eso queremos averiguarlo, que aguanten la típica caída que se produce en las carreras y que hace que el piloto arrastre su cabeza por el asfalto y, después, sufra un golpe», cuenta Alonso. «El carbono, con el roce, mientras se arrastra pierde consistencia, se desgasta y, al sufrir el golpe posterior, puede dejar de proteger con eficacia».

Una vuelta para la historia

Miles de personas abarrotan este fin de semana el Circuit Ricardo Tormo de Cheste. La pole en MotoGP fue para Jorge Lorenzo, que tras lograr la primera posición en libres con 1:29.401 batió el récord del circuito.

El balear estuvo espectacular para destrozar en tres ocasiones su propio récord. El mallorquín lo tenía desde 2015, cuando hizo 1:30.011. Entonces dijo que hizo «la vuelta perfecta». Esta vez, en su despedida de Yamaha, realizó una sesión bestial. Salió el primero y ya fijó un 1:29.849 de entrada. Era la primera vez que se rompía la barrera del 1.30 en Cheste.

Por su parte, Márquez y Rossi ocuparán la segunda y tercera posición, respectivamente. Maverick Viñales y Pol Espargaró saldrán en segunda línea, y Pedrosa y Aleix Espargaró, en tercera. Espectáculo asegurado. H