El Castellón incorporó a Nuha Marong como refuerzo para los play-off. No marcó, pero sí dejó huella con una gran jugada con pase de gol a Cristian Herrera ante el Tropezón y jugando bastantes más minutos de los esperados en las tres eliminatorias.

Fue de los primeros, en verano, en encontrar destino, tras la limpieza en Castalia. Codiciado desde hacía tiempo por el Atlético Baleares, para la isla se fue, aunque ha estado a la sombra de otro 9 como Marcos de la Espada. Sin embargo, el atacante gerundense ha ido haciéndose un hueco y ser resolutivo: ahí están sus seis goles en apenas 1.074 minutos.

El rendimiento de Nuha, incluso, ha llamado la atención del seleccionador de Gambia (el exalbinegro, aunque nacido en Santa Coloma de Farners, tiene orígenes en este país). Es más, el belga Tom Saintfiet estuvo viéndole el domingo en Son Malferit, en la victoria que los locales empezaron a fraguar frente al Hércules (2-0) con el 1-0 de la Pantera, que vuelve a amenazar al Castellón, después de que en Castalia, en el primer partido de la temporada, tuviese una ocasión para el 1-2. Nuha podría estar, en primavera, en los partidos clasificatorios para la próxima Copa de África.

El Atlético Baleares, que recupera a los sancionados Biel Guasp (lateral izquierdo) y Marc Rovirola (centrocampista), contará desde hoy con Rubén Miño: el portero, sin equipo desde que el Albacete le dio la baja en junio, estará a prueba con Manix Mandiola.