La final de Vigo llega con turbulencias para el Villarreal CF, concretamente en la zona defensiva. La cantidad de lesiones que asola al Submarino en estos momentos, un total de siete, más la baja de Funes Mori por sanción, han convertido en un rompecabezas el posible once que pueda poner mañana el técnico groguet, Javi Calleja, en el esperado duelo ante el Celta (18.30 horas).

Con Gerard Moreno y Javi Fuego prácticamente descartados, más las bajas seguras de los lesionados Bruno Soriano, Manu Trigueros y Miguel Llambrich, Miguelón, al entrenador madrileño solo le quedan las alternativas de recuperar o bien a Jaume Costa —en la fase final de su elongación— o a Daniele Bonera —más complicado al tratarse de una rotura—.

Es por ello que el míster ya está tirando de ingeniería de pizarra para plantearse las diferentes situaciones que puedan darse en el equipo inicial de mañana, donde incluso podría bajar a Iborra a ejercer de central, o dar entrada en el once a algún canterano.

La opción Jaume Costa

La inclusión del lateral izquierdo en el once, pero como carrilero derecho, forzando su reaparición, es la que a día de hoy es más factible. Con su entrada, Mario pasaría a jugar de central por la derecha junto a Álvaro y Ruiz. La medularla formarían Iborra en el pivote, con Cazorla y Fornals o Morlanes de interiores.

Forzar a Bonera

Si Jaume Costa no tiene buenas sensaciones, otra posibilidad sería acelerar el regreso de Bonera para que liderara el centro de la línea de tres centrales, con Mario y Perdraza como carrileros.

El factor Iborra

Si ninguno de los dos lesionados recuperables llegan a tiempo, por la mente de Javi Calleja y de su cuerpo técnico existe la posibilidad, más que real, de retrasar la posición de Vicente Iborra, para compartir línea de tres centrales junto a Álvaro y Víctor Ruiz.

El valenciano ya ha jugado en sus diferentes equipos como zaguero, en una variación táctica en la que Mario y Pedraza serían los carrileros y Cáseres pasaría a ser el pivote del equipo, por detrás de los Cazorla, Fornals, Morlanes y compañía.

Posibilidad de un canterano

Y la última alternativa, la menos probable al menos de inicio y que podría afectar a dos posiciones diferentes, pasa por echar mano del filial. Tanto podría ubicarse a un canterano como carrilero por derecha, pasando Mario a ser central, o colocar a un central del B, pasando Mario a su hábitat habitual, la banda.

El problema es acertar en el perfil, ya que el jugador con el que más se cuenta es Quintillà, pero es lateral izquierdo, aunque podría actuar en el carril diestro de una forma similar a lo que Calleja emplea con Jaume Costa.

El internacional sub-21 por Rumanía Andrei es la otra variable para el carril diestro.

Como centrales, el míster groguet ha probado con los canteranos Pepe Castaño y Joan Salvá, que por edad pueden subir y bajar con el primer equipo y el B.