Si los votos que suman la ajustada diferencia que permitirá al morellano Ximo Puig formar de nuevo gobierno en la Comunitat como líder de las izquierdas son 40.011, los mismos que han negado a la valldeuxense Isabel Bonig su acceso presidir un Consell de derechas, uno de cada cinco de esos apoyos clave, el 20%, procede de Castellón, La proporción es sensiblemente elevada, casi el doble que la cuota que tiene esta provincia por población, de poco más del 11% de la Comunitat.

En todo caso, la limitada ventaja de tres escaños que las urnas han dado al bloque que forman los partidos del Botànic, el PSPV del president Puig, Compromís, con Mónica Oltra al frente, y Podem, liderado por Rubén Martínez Dalmau, se debe a las circunscripciones de Valencia y la mencionada de Castellón.

Lo cierto es que los electores de Alicante concedieron el pasado domingo un margen vencedor a las formaciones de derechas, PPCV, Ciudadanos y Vox más elevado que el cosechado por el líder socialista en todo el territorio autonómico, ya que suma 42.538.

Solo la alta proporción de respaldos en el territorio con más población, Valencia, donde el grupo del Botànic reunió 74.980 papeletas más que sus contrarios cerró las puertas a un posible Consell a la andaluza, con Bonig al frente tras pactar con el partido naranja de Toni Cantó y con el apoyo desde fuera de la formación del ya diputado electo de Vox, José María llanos.

Esa porción, y también las 7.956 papeletas de Castellón que decantan la balanza hacia el trío botánico. Aquí, los 153.663 votos que agrupan las izquierdas proceden de las 85.166 concedidas a los socialistas, en franca subida (66.590 hace cuatro años); los 44.506 que recibió un Compromís que en esta circunscripción gana casi 2.800 votos sobre los 41.710 de las anteriores autonómicas; y los 23.997 atribuidos a Podem, que se deja por el camino desde los 33.680 de los comicios previos casi 9.700.

Por las derechas, el PP tiene que conformarse con 66.573 apoyos (19.563 menos); Ciudadanos crece hasta 46.778 (gana 14.504); y Vox irrumpe con 32.362, de modo que suman 145.713 votos.

participación valiosa // La participación castellonense en el margen de las izquierdas, sin ser imprescindible para hacer posible alcanzar en Les Corts la mayoría absoluta de los 50 escaños, sí lo es para contribuir a ampliar lo reducido de una ventaja que es suficiente y ayudar a sumar 52 escaños con los 27 del PSPV, los 17 de Compromís y los ocho de Unidas Podem, cuyos titulares tomarán posesión el próximo 16 de mayo en la sesión prevista para que se constituyan las nuevas Corts.

Enfrente, están los 47 asientos parlamentarios del bloque de las derechas, con los 19 de los populares, 18 de Cs, y diez de Vox.

Esa será la situación, calcada de la salida en las urnas al cierre del cien por cien del escrutinio, siempre que el puesto que basculó el domingo entre Compromís y el PPCV -otorgado por momentos durante la madrugada a populares o nacionalistas-- no cambie como consecuencia del recuento del voto de los residentes en el extranjero, el conocido como Cera, del que depende.

la futura oposición // Con este escenario, en el que todos los partidos han dado por hecho que habrá una reedición del Pacte del Botànic, tras constatar que el bloque de la izquierda suma más escaños que el de la derecha, está en marcha ya un periodo --elecciones municipales mediante el 26 de mayo-- en el que en ambos bandos políticos habrá partido.

Del lado del futuro Consell tripartito, las tres formaciones protagonistas tendrán que hilar muy fino para mantener su diferenciación y, al mismo tiempo, lograr acuerdos que dibujen una escena de estabilidad --con sus más y sus menos-- como la de la primera legislatura. En cuanto a la oposición, si Isabel Bonig, la más votada de la tríada de las derechas ya ha destacado que el liderazgo le corresponde al PPCV, Toni Cantó, de Ciudadanos, aspira a ocupar la misma posición.