El único gran país europeo en el que el azulejo mostró un comportamiento negativo en los diez primeros meses del 2018 fue un Reino Unido en el que la incertidumbre vinculada al brexit provocó un descenso de las ventas del 0,7%.
Esta ligera caída de las exportaciones preocupa en el sector porque se trata del tercer mercado más importante por detrás de Francia y Estados Unidos y porque la bajada se podría prolongar si se produce una desconexión abrupta y sin acuerdo entre el Gobierno británico y la Unión Europea. En este sentido, las firmas azulejeras estuvieron bien representadas en la jornada que, bajo el título La empresa española ante el brexit, organizaron el pasado jueves la Cámara de Comercio de Castellón, el Instituto de Comercio Exterior y la Confederación Empresarial Valenciana.
En ese acto, representantes del Gobierno instaron a las empresas a preparar planes de contingencia que contemplen el peor escenario. Asimismo, explicaron que un brexit duro podría provocar aranceles máximos del 22% hasta que las instituciones comunitarias y británicas pactaran la nueva relación comercial. Asimismo, la salida de la UE provocará más tiempo de espera en las aduanas, lo cual supondrá un sobrecoste para las firmas.
