Al menos tres subsaharianos han muerto este pasado domingo por la noche en Marruecos en un intento de pasar la frontera ilegalmente en Ceuta, según fuentes de dos oenegés y a falta de información oficial marroquí.

Varios testigos que participaron en el intento contactaron con las oenegés a través de sus teléfonos móviles, aunque posteriormente la policía marroquí les confiscó los teléfonos y los trasladó al sur del país.

Según Helena Maleno, de la ONG Caminando Fronteras, son tres los muertos, supuestamente ahogados, y que han sido sacados de las aguas por agentes de las Fuerzas Auxiliares marroquíes, mientras que Camara Lay, coordinador del Consejo de emigrantes subsaharianos elevó esta cifra a cuatro muertos. Las dos fuentes coincidieron en afirmar que el asalto de esta noche pasada fue "de una gran violencia" en la parte española de la valla y en la marroquí.

La Guardia Civil de Ceuta aseguró, por su parte, que ni siquiera intervino porque los inmigrantes (unos 200) no llegaron hasta el lado español de la valla. Los agentes habían desplegado cerca de una veintena de vehículos en el paso fronterizo por si se producía la llegada al vallado del espigón situado en la playa.

La costa donde han fallecido es conocida como Beliones y está formada por un núcleo poblacional situado en los pies de la montaña donde viven no más de un millar de marroquís que disponen de un visado especial para entrar en Ceuta cada día.

Además de los muertos, en el asalto se han registrado heridos, algunos incluso con fracturas, señaló Maleno, que habló con varios de los protagonistas.

LOCALIZADOS 17 INMIGRANTES LLEGADOS EN PATERA

Unidades de la Comandancia de la Guardia Civil de Ceuta han localizado este lunes a primera hora de la mañana a 17 personas de origen subsahariano en las inmediaciones de la playa del Desnarigado, donde se supone que habrían sido dejados minutos antes desde una embarcación que no ha sido localizada.

El Equipo de Respuesta Inmediata ante Emergencias (ERIE) de la Cruz Roja ha atendido a los recién llegados, 16 varones y una mujer.

La Guardia Civil había desplegado a los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) durante toda la noche en el extremo norte del perímetro fronterizo que termina en el espigón de Benzú, donde el pasado 25 de diciembre se registró el último intento grupal de acceso a la ciudad autónoma, que terminó con la entrada en territorio español de 182 personas y el fallecimiento en aguas marroquíes de al menos dos.

Según han informado fuentes de la Comandancia local, los indocumentados han llegado hasta la vecina localidad marroquí de Beliones, donde han sido repelidos por las Fuerzas de Seguridad marroquís.