Poblaciones singulares de Castellón, sus playas más características, rutas por los recursos naturales, visitas a museos, fiestas de interés turístico... Todo, para conocer de norte a sur y de este a oeste la provincia, sus encantos y sus tesoros mejor guardados.

Y es que Castellón posee un patrimonio cultural, histórico y artístico amplio y de gran valor. Poblaciones como Ares del Maestre, Burriana, la capital de la Plana, Catí, Culla, Jérica, Morella, Onda, Peñíscola, Sant Mateu, Segorbe y Vilafamés son localidades declaradas conjunto histórico-artístico por el Ministerio de Cultura, debido a la cantidad de monumentos que aglutinan.

Pero además, esta guía brinda información sobre los más de 120 kilómetros de costa de la provincia, que atesora una gran variedad de playas de arena, de piedras y hasta recónditas calas escondidas en entornos de parques naturales protegidos. Demostración de la calidad de las aguas y servicios son las más de 20 banderas azules que cada año concede la Fundación Europea de Educación Ambiental, algo que convierte las playas en el principal atractivo turístico de la provincia de Castellón.

Asimismo, tanto los municipios de costa como los del interior guardan mágicos rincones. Parte de la extensa lista la conforman el río subterráneo de las grutas de Sant Josep, en la Vall d’Uixó; la estación náutica de Benicarló-Peñíscola; las villas de Benicàssim; la Torre del Rey de Orpesa; el parque natural de Valltorta; el parque minero del Maestrat; el Planetario de Castellón; el poblado ibero del Puig de la Nao, en Benicarló; el arco romano de Cabanes; la Cartuja de Vall de Crist de Altura; el santuario de la Balma en Zorita del Maestrat; el Real Santuario de la Mare de Déu de la Salut de Traiguera; el Salto de la Novia de Navajas; el recinto amurallado de Mascarell; o Dinomania, en Cinctorres.

RECURSOS NATURALES // Castellón no solo presenta en su territorio la mayor superficie protegida de toda la Comunitat, sino que la variedad de paisajes y áreas naturales es inmensa. Desde el hayedo más meridional de Europa (en la Tinença de Benifassà), hasta los bosques de alcornoques (Serra d’Espadà), pasando por las dunas regeneradas de Castellón. Los hábitats naturales de la provincia acogen más especies vegetales y de fauna de las que se pueden encontrar en muchos otros países. Todo un mundo por (re)descubrir, de la mano de Mediterráneo. H