Un festival para todos los públicos y para disfrutar de la música a cualquier edad. Así es el formato del FeCStival, que cumplió ayer su séptima edición y no defraudó en su espectacular puesta en escena en el parque Rafalafena de la capital de la Plana, con 15 horas de música non stop.

La jornada comenzó ya de buena mañana, con las actividades y talleres infantiles, así como la zona gastronómica, que complementó la programación de ocio de este evento, que cuenta con el respaldo de la Concejalía de Cultura. La organización diseñó un cartel musical de altura con el objetivo de subir al escenario a estrellas del panorama nacional, tal y como se tenía previsto: Cupido, Delaporte, Valira, Veintiuno y Caboverde. Los seguidores de Annacrusa y Novio Caballo --proyectos de reciente creación-- y Balloon Flights, corearon los temas más populares de estas bandas.

ESTRENO EN LA CITA / Anna Dobon, además, aprovechó el FeCStival para su estreno. El talento musical local también estuvo presente en esta convocatoria, puesto que participan dos músicos de Castelló: Fernando Borja y Pablo Ponz, quienes pertenecen a Valira y Caboverde, respectivamente.

Las notas de pop y rock calaron en el público, fiel a este estilo musical que siempre ha funcionado, aunque en recientes certámenes también dan cabida para la música más urbana, con tintes de trap y de electrónica.

PLAZA Y JARDÍN / Ser un evento intergeneracional, y al aire libre, con conciertos sobre los escenarios Plaza y Jardín, constituye una de las peculiaridades de este FeCStival. Por eso, el llamado FeCStival Kids invitó a padres e hijos a disfrutar al máximo de la música y el aprendizaje de talleres de ciencia, de jardinería, varias actividades deportivas, manualidades y cuentacuentos.

El programa lúdico es esta vez mucho más completo, con la incorporación de artistas como bailarines de street-dance, malabaristas o la batucada, que causaron sensación entre los asistentes de cualquier edad.

Algunas de las actividades giraron en torno al eje temático de la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente, con mensajes de concienciación que calaron con tanta fuerza como la música entre todos los asistentes.

El parque Rafalafena, con un extenso espacio verde, se ha constituido como la opción perfecta para llevar a cabo todo un evento de estas características, según indicaron fuentes de la organización y del área de Cultura.

El festival también cuenta, además de con el plato fuerte de las actuaciones musicales, con una zona gastronómica con food trucks variados y un espacio donde sentarse y descansar. El evento, en definitiva, brindó a Castelló todo un día dedicado a la música y a la diversión en familia, que acumula ya siete años en la ciudad.