Muy pocos saben que formó parte de Alaska y Dinarama. Vivió in situ la movida madrileña. Tiene una de las trayectorias musicales de mayor esplendor. Compositor y guitarrista, Ramon Godes estará en el Auditori el 23 de enero. Apartado de los mass media, su pasión es oír, practicar, escuchar, componer, enseñar y hablar de música selecta. Hijo del inolvidable presidente del Ateneo, Ramón Godes y hermano de la periodista cultural Patricia Godes (de familia de recio abolengo envuelta en la música exquisita), maneja el tango como quiere, con las referencias a los guitarristas de Piazzola, «un genio», Óscar López y Horacio Malvicino, sin olvidar las seis cuerdas de Narciso Yepes, versionando a Tárrega para el sello discográfico universal Deutsche Grammophon.

-¿Qué representa para usted actuar en el Auditori?

-Es algo muy importante. Es un lugar que impone mucho, Son lugares que dan mucho respeto. Interpretare composiciones mías, acompañado de Alejandro Royo, contrabajo; Anna Pitarch, violonchelo; y Michel Llorens, acordeón.

-Su trayectoria es muy importante en la música. Sin embargo, ¿por qué es tan desconocido?

-No lo sé. La verdad es que no tenido nunca eco mediático. Tampoco lo he buscado. Me he limitado a trabajar y a componer, intentando tener mi propia identidad como músico. También es verdad que he huido de lo comercial y de las radiofórmulas. Esa vertiente comercial de la música no me gusta y contemplo la música como algo artístico, muy bien hecho.

-Vivió ‘in situ’ la movida madrileña. ¿Qué supuso aquello? ¿Hay un antes y un después?

-Impregnó de aire fresco la música española y, sobre todo, se inició el camino para la profesionalización de la música. Artistas y bandas se fueron dando a conocer.

-Estuvo con Los Coyotes y Malevaje. ¿Qué balance hace de aquella experiencia musical y vital?

-Fue algo muy importante. Tanto con Los Coyote como con Malevaje, con los que hicimos creíble el tango y conseguimos unir Gardel con Piazzola, que era un genio.

-¿Por qué decide volver?

- Madrid se hacía muy duro. Con largos desplazamientos y porque tuve un desencuentro con Malevaje. No me gustaba la línea que estaban tomando.

¿Cómo ve el panorama de la música en Castelló?

-Hay una actividad musical tremenda y de gran calidad, aunque ahora no son buenos tiempos.