La sandía es la fruta por excelencia del verano y, quizá, la más refrescante que se puede encontrar durante esta época de calor en las fruterías de los mercados. Es ideal tomarla fresca, pero no demasiado helada, para disfrutar mejor de su sabor dulce.La sopa fría de tomate y sandía se ha convertido en un clásico de la cocina moderna. Esta sopa de color rojo intenso y de sabor fresco y afrutado es ideal para abrir boca poco a poco en las jornadas calurosas.

INGREDIENTES (4 personas): 1 sandía; 600 gr de tomates maduros, cubitos de hielo, hojas de albahaca o aceite de albahaca, pimienta, aceite y sal.

ELABORACIÓN: En primer lugar, quitar las pepitas de la sandía y cortarla en pedazos. Asimismo, lavar y cortar los tomates. Seguidamente, añadir a la sandía, los tomates, la sal, la pimienta y triturar hasta que esté todo bien deshecho y homogéneo. Pasa por un colador de malla fina y reserva en la nevera. Después, triturar a parte las hojas de albahaca con aceite de oliva y usar este aceite para decorar la sopa, ya servida en platos hondos. esta crema también queda muy bien con menta, que puede sustituir a la albahaca si se desea.