Jennifer Lopez confiesa que se siente «abrumada» por los elogios que está recibiendo su trabajo en la película Hustlers, y aunque dice que sería «muy bonito» ganar un Oscar, asegura que no quiere «pensarlo mucho». Lopez (Nueva York, 1969) encabeza un elenco mayormente femenino, en el que también aparece la cantante Cardi B, en esta historia sobre un grupo de bailarinas de estriptís que crean un método para estafar a sus clientes, muchos de ellos grandes inversores de Wall Street.

Hustlers, escrita y dirigida por Lorene Scafaria (Buscando un amigo para el fin del mundo, 2012), llegó a las carteleras estadounidenses el fin de semana [en España se estrenará el 22 de noviembre con el título Estafadoras de Wall Street] precedida de las buenas críticas que obtuvo en el Festival de Toronto, donde empezó a sonar el nombre de JLo como nominada a mejor actriz, principal o de reparto, en los Oscar. Algunos van más allá y señalan que la artista, que acaba de cumplir 50 años, podría hacerse con la estatuilla el 9 de febrero.

ALUD DE PIROPOS / «Sería muy bonito, pero no quiero pensarlo mucho», ha recalcado la intérprete en una entrevista con Efe en Miami. «Siento que ya gané, eso me hace llorar por todos los años trabajados y porque siempre he dado lo mejor de mí, y que alguien diga que lo estás haciendo bien es maravilloso», agrega.

Lopez se confesó a la periodista Hoda Kotb y habló de cómo se siente ante el alud de piropos: «Estaba sentada en mi cama y me enviaron las reseñas. No podía creerlo. Lloré. Mi amiga de hace 20 años y yo estábamos sentadas allí y ella trataba de filmarme. Pensé, ¡Dios mío! Trabajas duro toda tu vida y te preguntas si alguien lo percibe. Es como cumplir tus sueños de cuando eras una niña pequeña».

EN LA SUPERBOWL / Si finalmente su nombre figura entre las nominadas al Oscar, el 2020 podría ser un importante año en su carrera en vista de que aparece también en las quinielas para protagonizar el espectáculo del descanso de la Superbowl, la gran final de la liga de fútbol americano, que se disputará en Miami y constituye el gran acontecimiento deportivo (y televisivo) de la temporada en EEUU. «Siento que cada año estoy mejorando, siempre trato de ser la mejor, tanto a nivel personal como profesional», señala.

En el largometraje, Jennifer Lopez se mete en la piel de Ramona, una estríper de Nueva York que junto a otras compañeras de oficio intentan estafar a millonarios de Wall Street. «Ramona es una salvaje, es una mujer muy fuerte, pero también es una persona que cuida de los suyos», comenta la actriz acerca de su personaje en este filme, basado en una historia real y en la que también actúan Constance Wu, Julia Stiles, Keke Palmer, Lili Reinhart y Lizzo.

Para interpretar el papel, la cantante de origen puertorriqueño tuvo que aprender a bailar en una barra como las de los clubs de estriptís y en principio creyó que sería fácil. «Fue la cosa más difícil que he tenido que hacer por una película», reconoce. «Creía que iba a ser algo divertido, pero acabé con todo el cuerpo herido y con moratones por todos lados», recuerda entre risas.

Con una historia en torno a mujeres que se ganan la vida bailando sensualmente para ricos hombres de negocios, la película está expuesta a la polémica dado el actual contexto social a favor de la igualdad de género y del #MeToo, el movimiento de denuncia sobre situaciones de acoso y abuso sexual. «Cuando vean la película verán que es algo muy diferente, que habla de la amistad, y yo creo que incluso empodera mucho más a las mujeres», asegura la también productora ejecutiva de la película.

Lopez destaca que son «tiempos muy buenos» para los latinos en Estados Unidos y en la meca del cine, donde la lucha por una mayor diversidad es diaria.