E l próximo lunes comenzará la Convención Nacional Demócrata, el evento que servirá para investir oficialmente a Joe Biden como candidato demócrata a la presidencia y dar paso a una nueva fase en la campaña para las elecciones del 3 de noviembre. Aunque la convención será completamente virtual, debido a la pandemia de coronavirus, todo está listo para su arranque: se ha anunciado la agenda, los ponentes y los temas que se abordarán. Solo falta por conocerse la guinda, la mujer que acompañará a Biden como candidata a la vicepresidencia. Su nombre es uno de los secretos mejor guardados del país, pero tras varios retrasos se espera que el anuncio sea inminente. En la quiniela hay más de media docena de candidatas, la mayoría de ellas negras y de corte centrista.

Nunca hubo tanta presión para que un candidato demócrata escogiera a una mujer afroamericana como lugarteniente, algo que no ha sucedido nunca en la historia. Las protestas contra el racismo de principios del verano, unidas al papel decisivo que jugaron los votantes negros para resucitar la moribunda candidatura de Joe Biden tras sus desastrosos resultados iniciales en las primarias demócratas, han servido para dar peso a las demandas de la comunidad negra.

De todas las afroamericanas, la favorita es Kamala Harris, una de sus rivales en la reciente carrera por la nominación demócrata. La senadora fue fiscal general de California y, aunque su desempeño en las primarias fue decepcionante, tiene apoyos tanto en el ala centrista como progresista del partido. Susan Rice parece ser la preferida en el entorno de Barack Obama, al que sirvió como asesora de seguridad nacional y embajadora ante la ONU. Su fuerte es la política exterior, pero nunca ha sido votada para cargo alguno y tiene fama de prepotente.

Otras posibilidades son la congresista Val Demings, la primera mujer negra en dirigir un Departamento de Policía en Florida, concretamente en Orlando. Ideológicamente centrista, se dio a conocer durante el impeachment a Donald Trump, en el que ejerció como fiscal de la acusación. También suena Karen Bass, diputada por California y presidenta del caucus negro en el Congreso, una antigua activista comunitaria y brigadista en Cuba, que ha ido moderando sus pulsiones izquierdistas para convertirse en una efectiva jugadora de equipo en el Capitolio.

Pero tampoco se descarta que Biden pueda dar la sorpresa, y esta podría ser Tammy Duckworth, una veterana de guerra de origen asiático. La senadora es hija de un marine y una madre tailandesa, nació en Bangkok, se crio en Asia y fue la primera legisladora en dar a luz mientras servía en la Cámara alta. Combatiendo en Irak, perdió las dos piernas y en Washington tiene fama de ser pragmática y muy efectiva. Lo que no quita que Biden pueda optar al final por una vicepresidenta blanca. Gretchen Whitmer, la gobernadora de Michigan, o Elisabeth Warren, la candidata predilecta de la izquierda del partido y la mujer que más fondos de campaña ha recaudado para Biden, seguida por Harris. H