El exalcalde popular de Vila-real Juan José Rubert declaró ayer ante el magistrado del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Vila-real, que le citó como investigado (antes imputado) por el caso de las facturas irregulares de Piaf --que rubricó en un endoso por importe de casi 600.000 € unos días antes de dejar la alcaldía, en junio del 2011, y que el actual equipo de gobierno liderado por José Benlloch se negó a pagar--, que confiaba en los documentos que le pasaban los técnicos para rubricarlos.

Así se desprende de la declaración que Rubert realizó en el Palau de Justícia de Vila-real por espacio de una hora y en la que, según informó el actual alcalde, José Benlloch, se negó a responder a las preguntas de la abogada del Ayuntamiento, “que representa los intereses de todos los vila-realenses”, aunque sí que contestó a las formuladas por su letrada. Y tampoco dijo nada a la prensa a su salida de las instalaciones judiciales --a las 15.30 horas--, “por consejo” de su abogada.

Al respecto, su sucesor en el cargo, el socialista Benlloch, lamentó que Rubert “se sume a la táctica” a la que les tienen “acostumbrados los miembros del PP en los últimos meses, el ya manido ‘yo no se nada’ y ‘la culpa es de los técnicos’ y de ‘otros concejales”, llegando a aseverar “que no conocía el contenido de las facturas o los endosos” que firmó.

En términos similares se manifestó el que fuera concejal de Servicios Públicos en las últimas legislaturas de gobierno del PP, Ramón Tomás, quien llegó puntual --antes de las 12.00 horas-- a su cita ante el juez, también como investigado. En su caso, incluso, llegó a mencionar a otros ediles compañeros del ejecutivo del que formaba parte, entre ellos el responsable de Hacienda, Ignasi Clausell. Aun así, a preguntas de los periodistas, Tomás se limitó a reiterar que él no rubricó ninguna de las facturas que están en el proceso penal que se instruye por la presunta comisión de delitos de falsedad, prevaricación y malversación. Y aseveró: “No entiendo por qué se me ha llamado, pero vengó aquí para defenderme”.

También estaban citados por el juez el que fuera entonces arquitecto técnico del consistorio, Miguel Ángel Zorilla; y el expresidente de Piaf, Antonio Pons, que no comparecieron al alargarse en exceso las declaraciones de Rubert y Tomás. En ambos casos, se ha aplazado su testimonio judicial para el próximo 9 de abril. H