Cuando ustedes lean este artículo habrán pasado alrededor de 48 horas desde que el Congreso de los Diputados, cuyos miembros han sido elegidos democráticamente por los ciudadanos de cada provincia, haya elegido también democráticamente, al que será el futuro presidente del Gobierno de España. Éste, a su vez, elegirá a su equipo que formará el futuro Gobierno de España, un gobierno plural. Ya ven, todo muy democrático y creo que no me la juego excesivamente si intuyo que cuando lean estas líneas España aún no se habrá roto ni el mundo se habrá acabado como algunos se encargan de recordarnos a todas horas en los medios y en las redes. Y por cierto, en Castelló tendremos en ciudad, provincia, comunidad autónoma y estado gobierno alineados, no me dirán que suena mal. En fin, que afortunadamente el desbloqueo político por fin se ha producido, pese a las faltas de respeto y de educación que nuestras señorías han demostrado los últimos días en el foro que debería ser un ejemplo de respeto entre diferentes, educación entre ponentes y democracia en estado puro. Desafortunadamente, nada más lejos de la realidad.

Pero me permitirán ustedes que no escriba hoy sobre la sesión de investidura (sus formas darían para mucho) ni de las bondades (y puntos débiles) de los documentos que dirigirán las políticas del gobierno de Sánchez. Los que me conocen ya saben que me gusta más hablar de municipalismo y de actuaciones que afecten a Castelló. Ya saben que no han sido las mejores semanas para los integrantes del Acord de Fadrell, sería un atrevimiento asegurar lo contrario. Pero también sabrán que tenemos mecanismos para resolver las diferencias de opiniones, habituales y naturales en un gobierno plural. Y en estos momentos de desacuerdo alguien podría pensar que esas diferencias repercuten negativamente en la ciudadanía y que el gobierno está parado mientras sus miembros nos tiramos trastos a la cabeza. Nada más lejos de la realidad, otra vez.

Y PARA MUESTRA un botón. O mejor dicho, más de cincuenta que son las propuestas que aprobamos en la última junta de gobierno del año. Y hoy mismo volvemos a aprobar unos cuantos asuntos más. Y todos los días, cada concejal, aprueba bajo sus competencias asuntos que repercuten en la mejora de la calidad de vida de los castellonenses. Seguimos trabajando pese a nuestras evidentes y normales diferencias. Por responsabilidad. Me permitirán que destaque una de las acciones aprobadas a finales de 2019 que verá la luz en 2020. La instalación de seis nuevos aseos públicos en plazas y parques. Tal vez les parezca una acción menor pero me gusta destacarla porque cuando en 2017 tomamos la decisión de ponerlos, recibimos las críticas del PP que incluso llegó a burlarse de la medida. El tiempo y la ciudadanía hablaron y creo que la aceptación es un hecho y por eso queremos ampliar los lugares que disponen de ellos. Los que antes se reían de la medida ahora nos piden que pongamos más aseos en lugares donde ellos nunca actuaron, ya ven la coherencia... Mientras se hace política en mayúsculas con palabras gruesas en Madrid, cada municipio sigue preocupándose por esas pequeñas cosas del día a día.

*Portavoz del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Castelló