Pedro Sánchez y Pablo Iglesias ya han tomado contacto. Hablan sobre el significado de: «Gobierno de cooperación». Sánchez plantea que hayan cargos de Podemos, pero no en la cúpula de los ministerios, sino en puestos intermedios de la Administración, planteando firmar un programa de investidura y garantizar que Podemos sea el socio preferente. Las reuniones públicas fueron mucho mejor que el primer encuentro en la Moncloa. La negociación seguirá porque ambos están condenados a entenderse.

Para Podemos, Gobierno de cooperación es muy similar a Gobierno de coalición: un Ejecutivo conjunto en el que la formación de Iglesias tenga una tercera parte de los ministros que nombre el PSOE, una relación similar a la que hay entre los diputados de uno y otro: 123 a 42. Pero para el PSOE Gobierno de cooperación es una cosa muy diferente del que se acaba de acordar en la Comunidad Valenciana, donde Podemos tiene una vicepresidencia. Sánchez trasladó a Iglesias que el significado de ese Gobierno de cooperación implicaría tres elementos importantes: por un lado, Unidas Podemos sería el socio prioritario del Ejecutivo. Por otro, se firmaría un acuerdo de investidura pactado entre los dos que marcaría toda la agenda política y por último, el PSOE no parece dispuesto a que Podemos tenga puestos en el Consejo de Ministros.

Sánchez le ha ofrecido otra solución, que es lo que él entiende como Gobierno de cooperación: puestos intermedios en la Administración para Podemos, pero sin ministros. No hay vetos a Iglesias sino una discusión sobre el papel de Podemos en la nueva legislatura. Solo el presidente decide la fecha de la investidura, pero posiblemente sea la segunda semana de julio próximo.

Esperemos lo mejor.

*Secretaría Área de Políticas Sociales y LGTBI PSPV-PSOE Castellón