Transcurridos ya dos años desde las últimas elecciones locales y autonómicas, estamos viendo cual es la verdadera cara de los auto denominados gobiernos del cambio. Han sido muchos los anuncios en prensa, pero poca la eficacia en la gestión.

Lamentablemente ejemplos los tenemos a diario. Todos ellos marcados por el sectarismo y la deriva ideológica nacionalista que tanto Mónica Oltra, como Vicent Marzà han impuesto a Ximo Puig, y que éste ha aceptado de buen grado.

El caos que viven actualmente muchas familias por no saber cual va a ser el modelo lingüístico en el que cursarán sus hijos los estudios el próximo curso, es un claro ejemplo. La justicia ha vuelto a anular el decreto del chantaje lingüístico que desde el Consell quieren imponer a las familias de la Comunitat Valenciana. Pero a pesar, de lo dictado por la justicia, el gobierno de la comunidad se ha empeñado en aplicar un decreto ilegal que en estos momentos debe ser sometido a un procedimiento judicial muy largo. El conseller debe explicar en primera persona qué va a pasar con los libros el próximo curso, qué va a pasar con los planes de estudio, qué ocurre con la admisión del alumnado de 3 años que han solicitado el ingreso a los colegios en base a un decreto que en estos momentos está suspendido. Muchas dudas por aclarar y sin ninguna esperanza de respuesta hasta el momento.

Pero otra muestra de la ineficacia y el sectarismo es el que nos está brindando día a día la consellera de Sanidad, Carmen Montón. No cabe duda que su objetivo de desmantelar el Hospital Provincial lo está llevando a cabo sin tener en cuenta la opinión ni de los profesionales, ni de los enfermos que allí son atendidos. Después de dos años, las cifras cantan. La lista de espera en cirugía se ha sextuplicado. De 187 pacientes en lista de espera, bajo la gestión de Montón se ha pasado a 1.172. A estas cifras hemos de sumar el éxodo de reconocidos médicos, que debido a los cambios que está introduciendo la actual consellera, han decidido cambiar de destino. Ello está provocando una preocupación generalizada entre compañeros y enfermos. En definitiva, los recortes efectuados por el equipo de la consellera Carmen Montón está provocando una bajada en la calidad asistencial, cuando si en algo se ha destacado el Hospital Provincial ha sido en una elevada calidad en la asistencia médica.

Pero además, a partir de ahora, gracias a la decisión de la actual consellera, los casi 150 clubes que tenían un convenio para realizar pruebas de esfuerzo y revisiones médicas, verán como les va a costar un 120% más.

En definitiva, los gobiernos que venían a rescatar a las personas están dejando bien a las claras que su principal preocupación no son las personas, sino aplicar sus políticas basadas en deshacer y desmantelar todo lo realizado por el Partido Popular, única y exclusivamente por puro sectarismo.

*Coordinador general PPCS