Querido/a lector/a, como casi siempre las elecciones al Parlamento de Estrasburgo están desaparecidas. Me atrevería a decir que en muchos actos no se dice nada o se da una ligera pasada por aquello de recordar que se debe votar dos veces.

Posiblemente, esta ausencia de las elecciones europeas cuando se realizan con otras (ahora con las municipales) se debe a muchas razones. Tan cierto que se podría decir que a pesar de su importancia, la UE representa un conjunto de instituciones que, a primera vista, están lejos de lo cotidiano. No tienen presencia ni explicación directa y permanente ante la ciudadanía. Otros, en cambio, podrían argumentar que la actual UE con mayoría de derechas y con sus expertos sin responsabilidad política no se han hecho de querer porque frente a la crisis han impuesto políticas duras de recortes sociales en las que no se ha defendido la justicia social y han fomentado la desigualdad. Incluso existe quien defiende que es mejor municipalizar o hablar solo de las municipales.

La cuestión es que estas elecciones son importantes porque después de dos guerras, seguir consolidando la unión de los países de Europa en un marco democrático aún es una necesidad. Además, el mundo va por la línea de la afirmación imperial de EEUU y de la emergencia de bloques como China, India… Pero también son importantes, porque la UE toma decisiones que nos afectan. En conclusión, estos son argumentos que nos ayudan a entender las elecciones al Parlamento de Estrasburgo como una oportunidad para que todas las instituciones de la UE cumplan con las metas de promover el desarrollo armónico y sostenible de la economía, la estabilidad, la elevación del nivel de vida y unas mejores relaciones entre países. Motivos que nos exigen votar por el progreso, en mi caso por el PSOE porque la derecha pura y dura está en contra de la UE y le reclama que devuelva competencias a los estados.

*Analista político