El bloqueo institucional al que nos tiene sometido la izquierda al no permitir formar gobierno a la fuerza más votada por los españoles y que además ha sido capaz de sumar 170 diputados en el Congreso no es obstáculo para que a nuestra provincia sigan llegando las inversiones que nos permitirán seguir creciendo en el futuro próximo.

La pasada semana los socialistas de Castellón reclamaban ante los medios de comunicación que se licitara la obra de la N-232 a su paso por el Puerto de Querol. Es un gran deseo, por supuesto, pero llegan tarde porque esa obra está ya licitada por el gobierno del Partido Popular después del bloqueo que padeció en los ocho años de gobiernos socialistas en Madrid. Debe ser triste aparecer en una rueda de prensa para reclamar que se ponga en marcha aquello que ya está en marcha. Quizás las personas menos informadas les aplaudan pero cualquiera con un mínimo de sentido común no puede sentir más que pena por un PSOE que primero no invirtió en nuestra provincia y que ahora no se entera cuando otros gobiernos, los del Partido Popular, hacen los deberes y sacan adelante las obras que generan empleo y riqueza además de vertebrar el territorio.

Las obras socialistas más emblemáticas en nuestra provincia son el proyecto Castor (1.800 millones de euros), una cárcel en Albocàsser donde prometieron que no la construirían y un par de desaladoras que no funcionan y donde malgastaron a sabiendas de su inutilidad otros centenares de millones de euros. Como verán obras de provecho ninguna. La suerte que tendremos en la provincia es que en los próximos años los socialistas solo tendrán la oportunidad de seguir reclamando licitaciones que ya están licitadas. Los ciudadanos les quieren seguir viendo en la oposición. H

*Diputado provincial del PP