Esta semana empieza la fase 0 de la desescalada. Se flexibilizan las restricciones de confinamiento para ir dando pasos hacia la nueva normalidad. Desde la semana pasada, niños y niñas ya pueden pasear por las calles; y, desde hoy, los adultos también pueden salir a dar paseos y practicar deporte en las condiciones de seguridad que ha establecido el Gobierno. Entramos en una nueva etapa del estado de alarma, en el que si bien es cierto que podemos recuperar ciertas prácticas habituales de nuestra vida en la calle, no debemos bajar la guardia ni relajarnos en pos de la protección de la salud de todos y todas.

Por ello, apelo a la responsabilidad individual y colectiva. Las administraciones públicas han luchado con su gestión y el trabajo incansable del personal sanitario, los cuerpos de seguridad y la colaboración ciudadana, contra la propagación del virus en nuestro país, pero no debemos perder de vista que el riesgo continúa vigente. Desde el principio de esta crisis, siempre he mantenido que Castelló ha demostrado un comportamiento ejemplar en el cumplimiento de las restricciones derivadas del confinamiento. En la ciudad se han registrado en torno a 800 denuncias por vulnerar las medidas de confinamiento, una cifra poco significativa en un municipio de 170.000 habitantes. Los vecinos y vecinas de Castelló han comprendido la importancia de preservar la salud pública, demostrando sentido de la responsabilidad y civismo. Sigamos así.

No debemos permitirnos recaídas en esta crisis. No podemos dar pasos atrás porque la salud de nuestros conciudadanos, el interés general, debe estar por encima de todo. Es comprensible el deseo de retomar la normalidad, y en ese camino estamos, con las fases de desescalada que ha determinado el Gobierno para las próximas semanas, pero seamos conscientes de que si nos relajamos, si incumplimos las medidas de protección, estaremos contribuyendo a aumentar el riesgo para nuestra salud y la de nuestros vecinos y vecinas.

Dependemos los unos de los otros, nos necesitamos los unos a los otros, y solo entendiendo que nuestra responsabilidad individual afecta a la colectividad seremos capaces de seguir respondiendo ante la crisis y reduciendo la propagación de este maldito virus que ha segado la vida de miles de personas y ha llevado al límite a nuestro sistema sanitario.

SIGAMOS actuando con la misma ejemplaridad demostrada por la inmensa mayoría de la sociedad castellonense en las últimas semanas. Aprovechemos la apertura progresiva de las puertas del confinamiento para disfrutar de nuestra ciudad, de nuestro entorno, de nuestros hijos y nietos jugando en la calle después de tantas semanas confinados para protegernos a todos (nunca agradeceremos lo suficiente a los niños y niñas el esfuerzo ingente que han hecho y siguen haciendo para preservar nuestra salud).

Pero no demos por ganada la batalla. Aún no. Hay que seguir luchando contra el coronavirus, hay que seguir haciendo frente a esta crisis sin precedentes que marcará nuestras vidas, para que no las marque todavía más. Saldremos de esta, con responsabilidad y valentía, como lo hemos hecho siempre ante cualquier adversidad.

*Alcaldesa de Castelló