La Consejería andaluza de Salud decretó ayer una nueva alerta alimentaria por listeria en relación al consumo de la carne mechada, en esta ocasión elaborada por la marca Sabores de Paterna, una empresa gaditana que habría distribuido el embutido en Cádiz, Huelva, Málaga, y Madrid. La alarma se decretó pocas horas después de que los laboratorios confirmaran el positivo en una muestra de la fábrica, aunque de momento no hay ninguna persona afectada por la dolencia. El Centro Nacional de Microbiología ya analiza si ambos focos pertenecen a la misma cepa, a la vez que las autoridades investigan si Sabores de Paterna y la sevillana Magrudis compartían proveedores o algún ingrediente.

Nada más conocerse el nuevo positivo en una segunda marca de carne mechada, la Junta de Andalucía ordenó el cese de la producción en la fábrica, ubicada en Paterna de Rivera, y la retirada del producto del mercado. Según detalló el consejero andaluz de Salud, Jesús Aguirre, fue la Comunidad de Madrid la que alertó de la sospecha de un nuevo caso de listeriosis el pasado 30 de agosto: un menor que relató haber comido un bocadillo de carne mechada adquirido en un supermercado de Cádiz en vacaciones, aunque de una marca diferente a la causante del brote.

Ese mismo día los inspectores recabaron muestras en el supermercado y en la fábrica de Paterna. Los análisis resultaron negativos, salvo el de la muestra tomada en la fábrica. «Estamos cruzando los proveedores de los ingredientes y productos que utilizaron ambas marcas para elaborar y envasar la carne, y analizando los puntos en común de los procesos de producción», añadió.

«A RAJATABLA» // Frente a las irregularidades administrativas de Magrudis, Sabores de Paterna está inscrita en el registro andaluz de industrias agroalimentarias y cuenta con autorización para fabricar embutidos y envasados cárnicos. En su web se presenta como proveedor de destacados chefs nacionales. Al mismo tiempo, el gerente de la compañía, Bartolomé Rodríguez, aseguró ayer que la fábrica cumple «a rajatabla» las normas sanitarias y se mostró sorprendido por el positivo de la analítica, ya que admitió que no tiene «ni idea» de cómo se ha podido producir la infección detectada en una pieza de sus carnes mechadas.

Esta alerta se suma a la ya decretada a mediados de agosto vinculada a los productos cárnicos La Mechá, que se ha cobrado ya la vida de tres personas y afecta a 214 personas en todo el país. 45 de ellas siguen hospitalizadas, y todos ellas son embarazadas.

NUEVO ABORTO // La Junta confirmó, además, un nuevo aborto, el séptimo, de menos de 23 semanas, por lo que defendió el nuevo protocolo para tratar de forma preventiva con antibiótico a todas las mujeres gestantes de la comunidad andaluza que hayan podido estar en contacto con la carne mechada contaminada, pese a no presentar síntomas.

En este sentido, la asociación Facua-Consumidores en Acción informó ayer a través de Twitter del fallecimiento el pasado mes de marzo de un bebé en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, nacido con siete meses de gestación, cuya madre asegura haber consumido la carne de La Mechá en fin de año. Un dato que ampliaría los plazos en los que la bacteria estaría en circulación.