El caso del rastreo de datos personales en las wifi públicas por parte de Google ha acabado con multa también en España siete años después. La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) ha impuesto una multa de 300.000 euros a Google España, la máxima posible, por recoger y tratar sin permiso datos personales como correos electrónicos y direcciones de redes y dispositivos.

Varios coches de Google Maps recorrieron entre el 2008 y el 2010 todo el mundo con la intención de fotografiar las calles de las principales ciudades, pero acabaron recogiendo indiscriminadamente información que captaban de redes wifi. La empresa tenía la intención de incorporar esos puntos wifi a su servicio, pero en lugar de desechar la información personal que no le interesaba, la conservó y la trató.

El caso lo destapó Alemania. La AEPD abrió entonces una investigación de oficio que tuvo que suspender después de que un abogado, Miguel Ángel Gallardo, en nombre de la asociación Apedanica, demandara a Google por «espionaje masivo». El juzgado de Instrucción número 45 de Madrid, tras años de pleito, ha acabado desestimando la reclamación y ha archivado el caso, lo que ha permitido a la AEPD recuperarlo y, tras investigarlo como asunto de protección de datos, emitir su sanción de 300.000 €.

No es la primera multa que le cae a Google por este tema, que ha sido sancionado en Europa.