Los cambios necesarios para evitar los peores efectos de la crisis climática no están a la vista. Así lo denunció ayer la joven activista Greta Thunberg ante el plenario de la Cumbre del Clima de Madrid. «El peligro viene de políticos y directivos de empresas que parece que actúan, pero lo que están haciendo en realidad es contabilidad creativa y propaganda», clamó la adolescente.

El mismo día en que se conoció que había sido designada por la revista Time como Persona del Año, Thunberg alertó de que en esta ocasión evitaría pronunciar sus famosas frases («Nuestra casa está en llamas» y «¿Cómo os atrevéis?») para centrarse en la evidencia científica.

Reaccionar ante las cifras / El presupuesto de emisiones que le queda al mundo para mantener el calentamiento dentro de 1,5 grados por encima del nivel preindustrial se acabará en ocho años, recordó. «¿Cómo podéis reaccionar ante estos números sin tener un poco de pánico?», interpeló a los asistentes.

«Comprometerse a alcanzar la neutralidad en el 2050 no tiene sentido si las emisiones continúan en los próximos años, porque nuestro presupuesto [de carbono] se está acabando. Tenemos que mantener el carbono bajo tierra», afirmó en su discurso.

«Desde los acuerdos de París, los grandes bancos han invertido 1.900 millones de dólares en combustibles fósiles. Los países del G20 son responsables del 80%. Tenemos trabajo por hacer, pero algunos más que otros», señaló la joven activista.