La Policía Nacional, en una operación con Europol, ha desmantelado en Girona una fábrica de envasado de leche falsa para bebés. Se han intervenido ocho toneladas de leche en polvo con las que rellenaban cajas de cartón impresas con nombres de conocidas marcas internacionales. La sustancia no era nociva para la salud, pero carecía de los nutrientes necesarios para la alimentación efectiva de un lactante. El producto había sido comprado al por mayor --a 1 euro el kilo-- en una página web polaca que estableció su punto de entrega en la ciudad de Barcelona. Tres de los cuatro detenidos en la operación ya están en prisión.

El producto era anunciado por internet, siendo China su principal destinatario. Los arrestados adaptaban la comercialización con el país demandante, por lo que empleaban diversas marcas en función de la popularidad.