Un equipo de neurocirujanos y neuropediatras del Hospital Sant Joan de Déu de Esplugues ha tratado a un niño de 9 años que padecía un grave trastorno del movimiento que le impedía caminar. Los neurocirujanos le han implantado unos electrodos en el cerebro para frenar las descargas neuronales responsables del trastorno que le retorcía los músculos, provocaba posturas anómalas, impedía caminar y amenazaba con postrarlo en una silla de ruedas. Tres semanas después de la intervención, el niño corre y juega al fútbol.

El paciente, que reside en Las Palmas de Gran Canaria, presentaba una distonía general primaria, un trastorno del movimiento que contrae de manera simultánea y sostenida los músculos, y provoca graves retorcimientos de las extremidades que incapacitan al niño de manera progresiva hasta inmovilizarlo completamente.

En la mayoría de los casos, estos niños no presentan otras afecciones neurológicas de forma que mantienen sus funciones cognitivas y son totalmente conscientes de la situación.

Aunque la estimulación cerebral profunda está aprobada por la FDA para el tratamiento de la distonía generalizada en niños y que es el único tratamiento efectivo en muchos casos, en España no hay ningún centro de referencia pediátrico para intervenirlos.

En esta intervención se ha utilizado un robot de última generación que permite implantar los electrodos en el cerebro con trayectorias planificadas previamente.

Respecto a la cirugía tradicional, el robot presenta como ventajas que los cirujanos no deben colocar un marco guía en la cabeza del paciente y pueden implantar múltiples electrodos en un lapso de tiempo más corto, circunstancias que reducen ostensiblemente la duración de la operación.

El Hospital Sant Joan de Déu atiende a pacientes de todo el Estado porque ha sido designado por el Ministerio de Sanidad centro de referencia nacional (CSUR) para el tratamiento de enfermedades raras que cursan con trastornos del movimiento en la infancia, como es el caso de la distonía generalizada primaria.