El Congreso alumbró este jueves el primer pacto de Estado de la legislatura, destinado a reforzar la lucha contra la violencia machista y lanzar el mensaje, con más de 200 propuestas de actuación, de que «los maltratadores no tienen cabida en la sociedad», en palabras de la ministra de Sanidad, Dolors Monserrat. Pese a la transcendencia del problema, en el que todos los partidos incidieron, las tensiones políticas afloraron durante el debate y Podemos se quedó fuera de la imagen de unidad y expresó con una abstención que el acuerdo incluye medidas y garantías de cumplimiento que considera insuficientes.

Tras meses de trabajo y discusiones calificadas de «acaloradas», todos los partidos han tenido que renunciar a puntos fuertes de su programa o filosofía en pro del pacto, como la eliminación del derecho a no declarar contra tu pareja al que se acogen muchas víctimas atemorizadas para no continuar adelante con sus denuncias, que el PSOE, PP y Cs quieren suprimir. Pero no por ello expresaron con un voto discrepante su postura. «Mejor un acuerdo imperfecto que desembocar en un desacuerdo perfecto», resumió el peneuvista Joseba Aguirretxea. De ahí que los portavoces parlamentarios afearan a Podemos que se quedara fuera. «La unidad frente a la violencia de género no admite deserciones por cálculo político», señaló la socialista Ángeles Álvarez. Cs por su parte reprochó al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que usara el pacto para «lavar su imagen» el día que fue a declarar al juicio de la trama Gürtel.

DOTACIÓN // El partido morado hizo oídos sordos y su portavoz, Ángela Rodríguez, aseveró que el documento pactado «no vale para las mujeres pobres, ni las transexuales, ni las violadas», no «reformula la desigualdad» de la sociedad, ni contiene una aportación presupuestaria eficaz. El documento obliga a destinar 1.000 millones de euros en los próximos cinco años, y la oposición advirtió al Gobierno que estará vigilante en su cumplimiento.

En torno al 80% de las mujeres víctimas del maltrato lo sufren en silencio y no se atreven a denunciar, de ahí que el pacto incluya un conjunto de medidas para incrementar la capacidad de detección de estas situaciones por parte de los servicios sociales y sanitarios. El pacto incluye un conjunto de medidas para mejorar la respuesta judicial y administrativa. Así, se establecerán unidades policiales que presten atención las 24 horas y se incluirán a los hijos de la maltratadas en las valoraciones de riesgo.

Los centros educativos, en todos los ciclos formativos, deberán impulsar medidas contra el machismo y además un protocolo de detección del maltrato. Y en los libros de texto se incluirá el movimiento feminista.

El PP no apoyó ayer un voto particular del PSOE destinado a reformar la ley de enjuiciamiento criminal, para suprimir el derecho a no declarar contra tu pareja al que se acogen muchas víctimas que, por miedo, deciden no continuar con el proceso judicial. Y es que Podemos se opuso desde el principio a eliminar la llamada dispensa porque, por principios, es contrario a eliminar un derecho de las mujeres. El PSOE anunció que presentará una iniciativa para reformar este precepto, que el PP podría apoyar.