París y 22 poblaciones cercanas alternarán el tráfico, prohibiendo la circulación a la mitad de los vehículos, debido a la persistencia de la contaminación de partículas finas y dióxido de nitrógeno, anunció ayer el prefecto de policía de París con el total apoyo de la alcaldesa. El objetivo es disuadir a los ciudadanos de utilizar el coche para hacer sus compras en el centro y canalizar la movilidad hacia el transporte público. RD