La Policía Local de Castellón puso a disposición judicial a 90 conductores durante el primer trimestre del 2017 por cometer, presuntamente, un delito contra la seguridad vial. La mayoría, un total de 71 investigados, son hombres, mientras que las mujeres se reducen a 19. Durante los meses de enero, febrero y marzo, los agentes de la Unidad de Atestados e Investigación de Accidentes imputaron a 64 conductores un presunto delito contra la Seguridad Vial por conducir bajo los efectos del alcohol. De esta forma, un 71% de los sancionados lo fueron por superar la tasa permitida, y en la mayoría de casos la triplicaron.

Asimismo, seis conductores se negaron a someterse a las pruebas de alcoholemia. Esta infracción, contemplada en el artículo 383 del Código Penal, es más grave que conducir ebrio, ya que conlleva penas de prisión de seis meses a un año y privación del derecho a conducir vehículos entre uno y cuatro años.

Por otro lado, el Cuerpo municipal denunció a dos persoasn por conducir bajo la influencia de sustancias tóxicas o estupefacientes. Cabe recordar que en el caso de las drogas, la mera presencia de estas sustancias en el organismo ya constituye una infracción administrativa.

Por último, en cuanto al delito de conducción temeraria, la Policía Local de Castellón ha investigado a cuatro conductores en apenas tres meses del 2017.