Adiós a un héroe de cuatro patas. La Guardia Civil ha anunciado este lunes la muerte de Marley, el perro policía especializado en rastrear restos biológicos que ha colaborado para esclarecer los crímenes más importantes de los últimos tiempos en España. Hace tan solo seis meses que el can estuvo trabajando a pleno rendimiento en Castellón para resolver el crimen machista de Nelea Sareva, la joven de 26 años presuntamente asesinada en Vinaròs a manos de su pareja sentimental.

Tal y como explican miembros destacados de la Benemérita, la aportación de Marley fue «crucial» para hallar los restos mortales de la víctima --su novio desmembró y lanzó a una fosa en Ulldecona, junto a la AP-7--, así como también en la localización de indicios por los distintos escenarios por los que estuvo el cuerpo de Nelea Sareva.

Pero las aptitudes del extraordinario perro policía fueron reclamadas por los investigadores en los casos más destacados de los últimos tiempos. Entre ellos, la búsqueda del cuerpo Gabriel Cruz en Níjar (Almería), o en los trabajos realizados en un pozo de una nave industrial abandonada en Rianjo (A Coruña) para extraer los restos de la madrileña desaparecida Diana Quer.

«Marley, nuestra estrella buscando restos cadavéricos, y que ayudó a resolver multitud de delitos, deja un gran vacío en los que tuvimos la suerte de trabajar a su lado», anunció ayer la Guardia Civil en redes sociales.

El extraordinario can policía sufrió el domingo una parada cardiorespiratoria derivada de problemas renales.