Una vecina de Castellón ha sido condenada a pagar una multa de 186 euros por amenazar a la que fuera su compañera de trabajo con “rajarle la cara”. El Juzgado de Instrucción 4 de Castellón la sentenció por un delito leve de amenazas y la Sección Primera de la Audiencia Provincial ha confirmado ahora dicha condena, tras desestimar el recurso interpuesto por la defensa de la procesada.
Los hechos sucedieron en la madrugada del 22 de julio del 2015, en las instalaciones de un restaurante del paseo Ribalta, según consta en la sentencia.
La condenada dijo a la víctima: “Te voy a rajar la cara y me da igual que llames a la policía porque no tengo nada que perder”. Y la esperó a la salida del trabajo, culpándola de que a ella la hubieran despedido. H
