La Audiencia Provincial de Castellón juzgará desde este martes a José Manuel López Pérez, conocido como falso médico Coté, que ejerció en Vinaròs. Cuatro personas se sentarán en el banquillo. El propio Coté y F.JG.A., acusados de hacerse pasar por médicos y por homeópatas en Vinaròs, diagnosticar enfermedades graves a varios pacientes, suministrarles medicación y someterlos a tratamientos, sin poseer la titulación ni los conocimientos necesarios para ello; la mujer de uno de ellos, que trabajaba como recepcionista y confeccionaba los presupuestos de los pacientes, y una médico que constaba como doctora responsable del centro.

LAS PENAS //

El fiscal pide penas de entre ocho años y medio y los 22 años de prisión que pide a Coté por los delitos de intrusismo, estafa, contra la salud pública y lesiones. los hechos sucedieron entre 2006 a 2009 cuando uno de los acusados abrió varias clínicas en el municipio en las que ambos ejercían.

LOS HECHOS //

Según la fiscalía F.J.G.A., puso en funcionamiento al menos desde 2006 una consulta en Vinaròs a pesar de que carecía la titulación necesaria para ejercer de médico homeópata. Posteriormente, se concertó con Coté, actuando de común acuerdo tanto para obtener un beneficio patrimonial ilícito como para ejercer actos propios de un médico titulado careciendo de cualquier título homologado en la materia.

En los centros recibían a los pacientes, les realizaban pruebas, emitían diagnósticos, en ocasiones de enfermedades graves que realmente no padecían, y les cobraban diversas sumas de dinero por los tratamientos.

UNA TESIS COPIADA //

F.J.G.A. presentaba a Coté como eminente neurólogo, especialista en implantes capilares, traumatología, entre otras especialidades. Coté intentó iniciar la homologación de un título obtenido en la Universidad de Montserrat cuando la tesis era una copia elaborada por un doctor de Dinamarca. Además, exhibía títulos para hacer creer que podía ejercer en España.

PRODUCTOS CADUCADOS //

En la clínica se hallaron productos caducados y no autorizados por la Agencia Española del Medicamento.

DESDE CÁNCER A TIÑA //

La fiscalía expone 25 casos de pacientes, entre ellos el de una mujer a la que le Coté le practicó una biopsia de tiroides en el sillón del dentista de la clínica, diagnosticándole un problema en el sistema inmunológico que podía derivar en bocio o cáncer, lo cual era totalmente incierto. A su hija un fallo en las células entre las neuronas que degeneraría en retraso mental cuando tuviera 18 o 19 años sin las pruebas de diagnóstico indicadas por la ciencia médica y a su otro hijo de 12 años la enfermedad de Chiari siendo falaz.

A otra mujer M.L.S.B. tras una extracción de sangre le diagnosticaron tiña a pesar de que el auténtico origen de su caída de cabello era el estrés y la ansiedad; le inyectaban sangre y se la volvían a inocular en la caeza y el brazo mezclada con otro producto.

A otra paciente López Pérez le realizó una biopsia de cabeza por un nevus sebáceo en el despacho de la clínica manifestándole que de no tratarse la enfermedad podría degenerar en ramificaciones y crear un cáncer en la cabeza, proponiéndole un tratamiento de 12.000 euros. Al otro paciente Coté le diagnosticó hepatomegalia sin padecerla, recetándole diversos productos homeopáticos.

A otra paciente le diagnosticaron fibromialgia o cáncer de pulmón, las cuales no correspondían a la realidad, sin practicarle las pruebas diagnósticas que recomienda la ciencia y aplicándole un tratamiento inadecuado, consistente en extraerle sangre con una centrifugadora para volver a inyectársela e inyectándole un producto no determinado.