La Policía Nacional, la Guardia Civil y la Agencia Tributaria han desarticulado una organización dedicada a introducir cocaína en España, procedente de Colombia y con destino a Alcoy, camuflada en contenedores de chatarra. Fruto de esta macrooperación, los seis integrantes que componían la banda, y que poseían más de 300 kilos de estupefacientes, han sido arrestados.

Los seis detenidos están acusados de captar a empresarios a los que convencían para transportar la droga en contenedores, camuflada entre la carga legal, y llegando a ofrecer hasta un millón de euros si el traslado se completaba.

La macrooperación empezó a finales de 2015, cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de un grupo dedicado a importar grandes cantidades de droga utilizando la cobertura de empresas importadoras y exportadoras de mercancías legales.

Las pesquisas llevaron a los agentes hasta el líder de la organización, una persona especialmente cuidadosa en sus comunicaciones con el resto de miembros de la trama para evitar ser descubierto. Tambíen mantenía contacto con ciudadanos colombianos que pretendían introducir cocaína en España y que procuró la infraestructura necesaria para llevar a cabo esta labor.