Una joven de 15 años falleció la madrugada del sábado al domingo en Sa Ràpita, en el municipio mallorquín de Campos, como consecuencia de las lesiones que sufrió después de ser arrollada por un coche que se dio a la fuga.

La joven sufría politraumatismos severos y una parada cardiorrespiratoria y, aunque los servicios de emergencias le aplicaron continuadas maniobras de reanimación, no pudieron hacer nada por salvar la vida de la adolescente.

Según informa el medio Crónica balear, la joven salió despedida varios metros a causa del brutal impacto y quedó inconsciente sobre la vía mientras la conductora huía a toda velocidad. Sin embargo, y tras ser testigo de lo ocurrido, el conductor del coche que circulaba justo detrás la siguió hasta que, aprovechando que interrumpió la marcha y detuvo el vehículo, logró interceptarla y retener a la fugada hasta la llegada de la policía.

La conductora, una mujer polaca de 45 años, quintuplicaba la tasa de alcoholemia, según dieron a conocer ayer fuentes policiales.

El trágico accidente tuvo lugar cerca de la 1.55 de la madrugada en el número 117 de la avenida Miramar, ante el asombro y la perplejidad de los conductores que circulaban detrás del coche huido.