Culpables por unanimidad del crimen del Eurosol. Los integrantes del jurado popular encargados de juzgar la muerte a tiros de un joven rumano en el año 2000 en Benicàssim han considerado que los dos acusados, I.V.P. y G.B.L., son autores de un delito de homicidio. Ahora será el magistrado presidente quien se encargue de dictar sentencia condenatoria, de acuerdo al veredicto alcanzado por el tribunal del jurado, e imponerles las penas de prisión pertinentes.
La Fiscalía pedía para ellos siete años de cárcel por matar a un compatriota, que falleció de un disparo en el tórax, que le atravesó la arteria aorta por encima del corazón, tal y como determinó la autopsia practicada al cadáver.
Los dos hombres declarados culpables fueron detenidos en el 2014 en Italia, catorce años después del homicidio. Y es que el caso permaneció sin resolver hasta ese año, cuando, tras retomar las investigaciones la Guardia Civil, un informe determinó que uno de los acusados tenía restos de plomo en su mano.
Aunque los dos procesados, que se encontraban junto a la víctima la noche de los hechos, negaron tajantemente durante todo el proceso ser los autores de la muerte, las pruebas en su contra han hecho que el jurado tenga clara su decisión. Cabe recordar, tal y como publicó Mediterráneo, que I.V.P. y G.B.L. señalaron a un encapuchado como presunto autor de los disparos durante su interrogatorio en la primera sesión del juicio.
TESTIMONIOS CLAVE // Determinante resultó el testimonio de una vecina de los apartamentos La Siesta de Benicàssim, que están ubicados justo enfrente de donde se produjo el crimen. Ella fue la persona que descubrió el cuerpo sin vida de la víctima, pues bajó a la calle a socorrerlo.
La mujer, sin titubeos, inculpó a uno de los acusados. «Un hombre se acercó al fallecido, le gritó algo en tono enfadado y se marchó. Llevaba una gorra y una chaqueta de piel marrón y llamé a la policía para avisar. Les dí su descripción física y lo encontraron. Era él, estoy segura», dijo la testigo a preguntas de la fiscal.
La declaración de los especialistas de Criminalística de la Guardia Civil también fue clave y es que, aunque la pistola homicida nunca llegó a encontrarse, los restos hallados en la mano de I.V.P. determinaron que él efectuó disparos con un arma.
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial dictará sentencia condenatoria en los próximos días por el crimen del Eurosol. H
