Iñaki Abad y Aratz Urrizola, dos de los ocho jóvenes condenados por agredir a dos guardias civiles y sus parejas en Alsasua (Navarra) el 15 de octubre del 2016, obtuvieron el tercer grado después de que el Tribunal Supremo rebajara sus respectivas condenas.
La Junta de Tratamiento de la prisión de Zaballa en la que se encuentran desde junio del 2018 atendió la solicitud de ambos condenados y la decisión fue ratificada anteayer mismo por la dirección del centro. Ahora será la Junta la que concrete el plan de ejecución del régimen abierto de forma individualizada.
Con la sentencia del Supremo, Urrizola pasó de una condena inicial de 9 años de cárcel a 4 años y 2 meses, mientras que a Abad le redujeron la pena de 6 a 3 años y medio, de modo que ambos ya han cumplido con creces una cuarta parte de sus condenas, el tiempo mínimo para empezar a solicitar permisos.
Tras la reclasificación del grado penitenciario que hizo este mismo mes la dirección de la prisión en la que se encuentran --trámite que suele ocurrir a los dos meses de la sentencia firme--, los dos jóvenes solicitaron la concesión del tercer grado y la Junta de Tratamiento se lo ha concedido. Abad y Urrizola no fueron los únicos condenados por la agresión de Alsasua que vieron reducidas sus condenas, sino que la revisión del Supremo afectó a todos al considerar que la agravante de discriminación por odio y la de abuso de superioridad no deben aplicarse en el caso del delito de atentado a la autoridad.
