Expertos en psicología abogan por que el niño de 14 años condenado por violar a otra menor en una colla durante las fiestas de la Magdalena del 2015 haga terapia durante su internamiento en un centro de menores “para que pueda ser reeducado en control de los impulsos y en las relaciones con las mujeres”.
Así lo explica el decano de la facultad de Ciencias de la Salud y profesor de Psicología de la UJI, Rafael Ballester, quien ha incidido, en declaraciones a Mediterráneo, en que recibir tratamiento o no será fundamental para su desarrollo.
“A pesar de la gravedad de los hechos que ha cometido, su juventud permite que pueda reconducirse con ayuda de especialistas. Sin embargo, si permanece encerrado tres años y no se le trata, la medida no tendrá efecto y puede convertirse en un peligro potencial”, ha revelado Ballester.
El decano asegura que, a esa edad, los chicos son más machistas que nunca, pues se trata de una etapa de definición de la masculinidad y en la que, además, son especialmente influenciables y están expuestos a modelos violentos de conducta. “Ahora cabría analizar el perfil psicológico del sentenciado, realizar con él un tratamiento para maltratadores (pues la violación es una forma de maltratar) y estudiar si se trata de una persona sádica, que disfruta con el sufrimiento ajeno”.
Para Ballester, en este caso “han fallado muchas cosas, entre otras, el entorno familiar, la educación y la sociedad”. H
